Silvia Mabel Isabella Valenzi

by @ Monday, Oct. 26, 2009 at 5:12 PM

Fecha de secuestro: 22 de diciembre de 1976 Tiempo de embarazo al momento del secuestro: 4 meses Fecha y lugar de parto: El 2 de abril de 1977, dio a luz a una niña en el Hospital de Quilmes a la que llamó Rosita

Silvia Mabel Isabell...
isa.jpg, image/jpeg, 299x498


Vista en CCD: Pozo de Quilmes - Pozo de Banfield - Brigada de Investigaciones de La Plata

Cuando se produjo la desaparición de Silvia, su familia comenzó una búsqueda a través de organismos y funcionarios que pudieran ayudar a encontrarla. Averiguó en comisarías, hospitales y tribunales de Menores. La búsqueda fue infructuosa durante los primeros meses, sin noticias de su secuestro ni de su paradero.
En los primeros días de abril la familia recibió la carta anónima que advertía sobre su cautiverio en Quilmes y sobre el nacimiento de su hija en el Hospital. Concepción de Isabella Valenzi, su madre, fue hasta la Brigada de Investigaciones de Quilmes, en donde le negaron conocer el caso. En el Hospital, se entrevistó con un doctor de apellido García (hoy fallecido) que le dijo que la nena había nacido y le mostró el registro en el libro de partos. Le sugirió además que hablara con el doctor Roberto Iriarte, aunque éste, visiblemente alterado, le negó rotundamente el conocimiento del caso.
Concepción volvió al hospital unos días después; la echaron y volvieron a negarle el nacimiento de su nieta. La misma respuesta recibió un enviado de la Embajada de Italia que hizo averiguaciones luego de la denuncia que había hecho la familia de Silvia ante esa dependencia. Después surgió la versión de su muerte dos o tres días después del parto por una afección pulmonar y su inscripción como fallecida, aunque —como ya fue mencionado— nunca fue entregado su cuerpo ni un certificado de defunción.
La familia Valenzi decidió entonces apelar a la Justicia. Presentó varios habeas corpus y se abrieron causas penales en algunos Juzgados. También hubo una presentación ante la Organización de Estados Americanos (OEA) y ante el gobierno italiano, pero todos los caminos resultaron infructuosos.
Finalmente, fue su hermana quien recurrió a Monseñor Emilio Graselli para que la ayudara en la búsqueda de Silvia. El eclesiástico le contestó con una fórmula conocida: “Si desapareció será porque en algo habrá andado.”

El destino posterior de Silvia
Cuando Silvia llegó trasladada al “Pozo de Banfield”, según los testimonios de personas que estuvieron en cautiverio con ella —Adriana Calvo y Ana Carriquiriborde— la pequeña Rosa ya había sido arrancada de sus brazos.
La muchacha le contó a Adriana Calvo que unos días antes había tenido un hijo en el Hospital de Quilmes. La historia era tan increíble —que hubiera parido en un hospital municipal y que luego le hubieran arrancado a su hija— que Calvo pensó que estaba delirando a causa de las torturas que había recibido.
En Banfield confluyeron gran cantidad de embarazadas que venían de otros centros y eran trasladadas allí para que fueran asistidas en la “clínica” montada en una de las dependencias del CCD. Adriana Calvo, que había alumbrado a su hija Teresa en un patrullero mientras la trasladaban de la Comisaría 5º de La Plata a Banfield, relató cómo “La Gata” y otras cautivas que habían tenido a sus hijos en cautiverio (y ya les habían sido arrancados) se opusieron con fiereza cuando los carceleros del “Pozo de Banfield” quisieron llevarse a la pequeña Teresa.

Apropiación de Rosa
La niña fue anotada en el libro de partos del Hospital de Quilmes con el nombre de Rosa Isabella Valenzi, aunque unas horas después fue groseramente tachado y corregido al costado como “NN”, mientras que en el libro de pediatría —que se lleva conjuntamente con el de partos— figuran sus datos completos, aunque se agrega que “falleció”. La historia clínica de Silvia desapareció del archivo del nosocomio. En el área de Neonatología se supo que la nena debió permanecer internada por su delicado estado de salud, y el jefe de dicha área tuvo un entredicho con el propio Bergés.
Algunas versiones sostienen que la niña fue retirada del hospital con vida, y otras que falleció. De todas formas jamás se entregó el cuerpo a los familiares y tampoco existe un certificado de defunción que ratifique esta última hipótesis. El neonatólogo Adalberto Pérez Casal refirió que esa circunstancia es “muy inusual”.

Silvia Mabel Isabella Valenzi, su hija Rosa, su compañero Carlos Alberto López Mateos y gran parte de su familia, continúan desparecidos.

Si tenés dudas sobre tu identidad y crees que sos hijo de desaparecidos envianos un mail a dudas@abuelas.org.ar o comunicate 0800-222-2285